TRUMAN CAPOTE: Un niño cumpliendo cien años
Hoy se cumplen cien años del nacimiento de Truman Capote . Libro de arena lo celebra con esta nota en la que María Fiorentino recuerda cómo fue su primera lectura de la obra de Capote. Y nos refiere cómo llegó a ser para ella, un eje, una marca, un autor fundamental. En el barrio sur de la ciudad de Rosario, donde nací, se leía Intervalo, El Tony y D’artagnan. Le sumo las policiales de Rastros y Pandora que leía mi padre, donde pude leer autores que mucho más tarde y más grande encontraría en el Séptimo Círculo. En mi casa había tres fanatismos: el de mi madre por el cine (llevaba un diario de las películas que veía) y el de mi viejo por el teatro y la poesía. El cuarto era el peronismo. Y el primero también. Ambos eran obreros de la Carne, Swift Rosario. Pero mi viejo tenía una biblioteca no muy grande pero si ecléctica. Poesía española (aprendí a leer con Lorca) Rostand y su Cyrano, tratados de leyes laborales, Freud, Omar Viñole, Héctor Gagliardi, Leoplán, con un señor que se lla