El deseo viaja en barco

Al deseo hay que ayudarlo. No siempre es fácil llegar al lugar en que se alojan los libros, y las ganas de leer necesitan un empujoncito. En el mundo entero existen proyectos que acercan a libros y lectores, acortan distancias físicas, salvan barreras climáticas y dificultades de acceso de todo tipo. Algunas son bellamente insólitas. Libro de arena publica una nota sobre un barquito que traslada los textos en un viaje de lectura real, en Bangladesh. Una original herramienta de acercamiento a la lectura: se trata de bibliotecas en barcos.



Este país del sur de Asia presenta barreras climáticas tales como inundaciones dos veces por año, derivadas de monzones típicos de la región. Las personas deben trasladarse a las inaccesibles orillas de los ríos y convivir con recursos insuficientes: falta de alimento, de educación, de servicios eléctricos, de teléfono, debido a que el desarrollo se ha concentrado en las ciudades más prósperas.
Estas tempestades traen, por lo general, consecuencias nefastas para los granjeros locales que, por más sofisticados métodos de agricultura que posean, resultan envueltos en pérdida de ganado y cosechas, lo que impacta también en la salud y el necesario sustento.
A pesar de esta situación, Shidhulai Swanirvar Sangstha se encarga, como organización sin fines de lucro, de que los ríos no sean impedimento de la información, sino, por el contrario, se conviertan en vías de acceso.
Shidhulai se propuso mejorar la calidad de vida de los habitantes del norte del país y, tiene como objetivo para ello, prestar servicios a estas personas a través de la creación y/o reacondicionamiento de barcos. Estos servicios incluyen educación de los niños, bibliotecas, entrenamiento en prácticas de agricultura, energía solar como generador de electricidad, asistencia médica, charlas de estrategias de adaptación al cambio climático, incremento de ingresos, alfabetización informacional y acceso a Internet.
Esta organización fue fundada en 1998 por Mohamed Rezwan que, como nativo de la región, convivió con la privación de las comunidades alrededor de los ríos, quienes no tuvieron acceso a la información y a la escuela. Rezwan pensó que si los niños no pueden ir a la escuela por escasez de medios de transporte, entonces la escuela debería ir por ellos.
Para el 2002 introdujo la escuela bote; éstos están equipados con libros y computadoras, centros de salud y centros de entrenamiento para las comunidades aisladas de la ribera.



Para conocer más sobre esta organización y sus proyectos, se puede visitar su sitio oficial aquí 


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