Verano: Leer y pasarla bien

Leer, el entretenimiento más simple y generoso. No necesita pantallas, ni baterías, ni enchufes. Un libro puede hacer que el viaje desde Retiro a Constitución un día de febrero, con 40º en la superficie y unos 5º más dentro del vagón del subte, sea fácil y ligero; o que la hora y media de demora en la sala de espera de un consultorio médico acribille el tedio a pura diversión. Lo único necesario es pegarla: elegir la opción adecuada. Por eso, cuando la gente de Bibliotecas para armar me pidió que recomendara algún libro para el verano, elegí cinco. Soy militante de la abundancia de opciones. Van algunos nuevos y otros vintage que, ojalá, se consigan en la biblioteca amiga. Cada cual elija de acuerdo a su situación o su estado de ánimo particular. Espero resulte útil.

  Por Nuri Abramowicz


1) COMO SI EXISTIERA EL PERDÓN, Mariana Travacio. Editorial Metalúcida.
“Allá donde vivíamos, venía el viento norte. Era un viento de calor que nos cercaba despacio hasta instalarse como un perro hambriento. Cuando nos tenía rodeados, dormíamos unas siestas interminables. Nos despertábamos cuando el sol se iba y el cielo quedaba con un resplandor que seguía levantando el olor de la tierra seca.” Así empieza a construir esta novela Mariana Travacio, cuya trama de acción no da tregua: un crimen desencadena una venganza que, a su vez, convoca lealtades, enemigos y amores. Como en los mejores westerns de Hollywood, Travacio escribe una épica gauchesca que avanza brillante, intensa y veloz.

2) LOS SORRENTINOS, Virginia Higa. Editorial Sigilo.
¿Cuántos policiales se publican en el año? ¿Cuántos libros de auto ayuda? ¿Cuántos ensayos sobre política y economía? ¿Cuántas biografías? ¿Cuántos dramas? ¿Y las comedias? ¿Cómo vienen en el ranking? ¿La industria del libro sigue considerándola un género menor? ¿Y los lectores? ¿Se sienten menos inteligentes si leen una novela que los divierta y los haga reír? Adoro las comedias con todo mi ser por eso, la historia del origen de los sorrentinos, con el protagónico estelar del Chiche Véspoli, está entre los libros que más disfruté en el 2019.

3) RABIA, Sergio Bizzio. Editorial Interzona.
Leí esta novela hace años. La encontré, la compré, la leí. Nadie me la había recomendado y por eso cuando la terminé, me enfurecí. ¿Cómo no me dijeron que existía este libro perfecto? Este año se cumplen diez años de su primera edición. Si no la leyeron, háganse el favor. Ya.

4) WAKOLDA, Lucía Puenzo. Editorial Emecé
Para escribir una novela que imagine el paso de Joseph Mengele por la Patagonia Argentina hay que ser original y valiente. Para hacer de esta historia un libro magnético y una película imperdible, hay que ser talentosa. Lucía Puenzo lo es y lo hizo. Bravo por ella, las lectoras, lectores y amantes del cine, agradecemos.


Comentarios

Entradas más populares de este blog

Cincuenta años sin J.R.R. Tolkien: cómo lo cuidó un sacerdote español y qué tiene que ver la Patagonia con “El señor de los anillos”

El crimen casi perfecto, de Roberto Arlt, Ilustrado por Decur

La lectura del tiempo