El mito y la leyenda en los cuentos para Franco

Seguimos con el mito, la leyenda, el relato oral y el terror. Por eso, mientras esperamos la visita de Hugo Mitoire, compartimos esta reseña del primer libro de la exitosa saga Cuentos de terror para Franco, que el chaqueño dedicó a su hijo y, con él, a todos los chicos y chicas lectores, del país en general y de su noreste en particular.


                                                                                                          A veces sigo a mi sombra.

                                                                                                          A veces viene detrás.

                                                                                                          Pobrecita, si me muero,

                                                                                                        con quien va a andar.

Vidala de Julio Santos Espinoza


Por Laura Inés Gutman*


Los mitos introducen en la cultura una cosmogonía del saber popular que, mediante la leyenda, vinculan al hombre con su entorno a partir de la transmisión del saber de sus ancestros. Los mitos se remontan a los orígenes para dotar de sentido el presente.

Siguiendo el pensamiento de Lévi-Strauss, la cultura viene a cubrir una falta en la naturaleza y a asumir el orden humano por sobre lo que la naturaleza deja al azar. Los mitos se remontan, en general, al origen del mundo, y en particular, a la explicación de fenómenos naturales apelando a un imaginario común que sostiene la cultura de los pueblos, su lengua y sus tradiciones.

El poder del mito radica principalmente en zanjar la brecha humana que opera entre la naturaleza y la cultura. 

En Cuentos de terror para Franco I Hugo Mitoire nos introduce desde su historia de vida en la provincia del Chaco, más específicamente en el paraje de Chancha larga, la aldea La Leonesa, su tierra natal. Sus estudios lo llevan a Corrientes, donde se graduó como médico cirujano y se especializó en medicina del trabajo. Durante 16 años ejerció la docencia y se instaló finalmente en Oberá, provincia de Misiones. 

El territorio del litoral que linda con la zona Chaco-Santiagueña es cuna de mitos y leyendas. La del Pombero, por ejemplo, que es un duende travieso que, entre sus habilidades, posee la de cambiar de forma, imitar el canto de los pájaros y asustar a los niños que andan por el monte a la hora de la siesta. Muchos le atribuyen la capacidad de proteger a la naturaleza de los depredadores humanos. 

En este volumen se cuenta también la leyenda de La luz mala y la de un Alma en pena, o La viuda, junto a otros relatos.

La habilidad del escritor para abordar cuestiones mitológicas con un lenguaje simple y una estructura narrativa sólida sostiene la tensión entre lo inexplicable y el saber popular. 

Así desfilan por sus páginas ánimas, aparecidos, fantasmas, espectros y poseídos, que hay que saber, no son la misma cosa. Sin que falte Mandinga o Supay, el Diablo.

 En fin, una fiesta para los curiosos y también para los miedosos. Ya que la finalidad de estos cuentos no es asustarnos, sino adentrarnos de la mano de un narrador adulto en un mundo fantástico que sobrevive en la raíz de toda cultura.


* Laura Inés Gutman, intérprete titiritera y de música popular. Licenciada por la UNA en Artes del Movimiento. Egresada del Teatro Colón en Regiè y de la Escuela de titiriteros del Teatro San Martín. Docente universitaria en la Licenciatura en Musicoterapia UBA. 




Cuentos de terror para Franco
Hugo Mitore
Editorial De La Paz, 2009.


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