Biblioteca de la casa Quispe

Marinés Gómez es la bibliotecaria de la Biblioteca Popular "Por caminos de libros" del Barrio Carrillo, en Villa Soldati. Una joven que vivió en el barrio años antes, y que concurría a la biblioteca, se comunicó con ella en estos días. Le contó que en este momento de encierro, armó una biblioteca en su casa del conurbano. Después de la charla, y de ver las fotos de la reciente biblioteca, Marinés escribió la nota que publicamos a continuación.




Por Marinés Gómez


Ayer 
antes de ayer
o hace unos días
en Lomas de Zamora nació una biblioteca.

En el barrio La esperanza hay una casa.
En esa casa vive la familia Quispe Quispe.
Y en la familia Quispe Quispe, crece Belén.

Era una chiquilina ella cuando empezó a venir a la biblioteca. Los Quispe Quispe vivían en el Barrio Ramón Carrillo. Y desde Camila hasta Jairo, tuvimos la suerte de encontrarnos para compartir tareas de la escuela, lecturas y conversaciones. Desde Camila hasta Jairo, quiere decir también Karina, Sandra, Fernando y Rafael.
Mientras Belén fue creciendo la escuché hablar de ser periodista, veterinaria y algunas otras  profesiones posibles. Pero el año pasado se puso el guardapolvo blanco para hacer las primeras observaciones en escuela, porque estudia para ser maestra, en la Sede Lugano del Normal 3.
Ayer Belén mostrándome una foto por teléfono, abrió una ventana a su casa del conurbano bonaerense.
Y como si tal cosa me contó:

“Estos días estuve recordando y echando de menos la biblio
Entonces gracias a mi papá 
Pude armar un pequeño pedacito de biblio en mi casa
Con todos los libros que durante los años fuimos obteniendo (de la escuela, regalos, comprados)
Y quería que la vieras
(…) Solo me hacen faltas de muchos cuentos”

Ella me muestra 
así como al pasar
la semilla germinada
de la biblio carrillense
en su casa de ahora.

Y en esa materialización de lo que Belén extraña me pude reflejar y comprender un poco más lo que también me pasa. 
En esta ebullición de sentires y pensares que a veces desespera, al punto de fantasear con cargar un carro de libros y recorrer Martínez Castro, Laguna, Lacarra, por los pasajitos de la A hasta la L, Fátima, Los pinos, La veredita, La esperanza del otro lado del puente….

Pero la conciencia trae la cordura. Tienen razón el presidente, sus ministros, los científicos… no es momento de hacer locuras.

Así que seguimos buscando las maneras sostener los vínculos con la comunidad de la biblio. Y hacemos malabares con las herramientas que no sabemos manejar del todo: Youtube, Facebook, Zoom, Jitsi, Whatsapp, videos y audios de edición superartesanal.  
Todo parece poco. Nada parece alcanzar. 
Tiene sentido: para nosotros la biblioteca es un lugar de encuentro en vivo.
Y la materialidad de los libros y los cuerpos juega su papel imprescindible allí.

Tal vez era inevitable entonces
que en pleno otoño
cuando las plantas y los árboles se retraen
se acurrucan
se desvisten de hojas y flores
para guardar su energía hasta la primavera,
haya brotado en la Casa Quispe Quispe
una biblioteca.


También dice Belén que le faltan cuentos. Ella sabe sin duda, cuál puede ser el lugar de la literatura en la vida de las personas. De las personas que en su singularidad prefieren instalarse aparte del mundo para  leer en silencio y soledad. Y también de las que eligen encontrase con Otres, en torno a los libros para compartir lecturas.

Se me hace que algunos nacimientos ocurren sin esperar que llegue “el mejor momento”. Que en todo caso el momento indicado es precisamente ese que genera la pulsión del deseo. 

Deseo de biblioteca tuvo Belén.

Bienvenida al mundo entonces, pequeña gran biblioteca de la Casa Quispe Quispe.
Ahí estás
aunque no te vean 
los miles de millones de seres
que poblamos el mundo.

Ahí estás
tan necesaria
como las fabulosas bibliotecas que el mundo admira
con sus miles de millones de ejemplares 
catalogados y clasificados
como la Diosa Bibliotecología manda.

Necesidad de biblioteca palpable
tuvo Belén
como tenemos tantos
y tantas
cada une todavía
en su rinconcito aparte
queriendo tender las manos
llegar a los estantes 
encontrar un texto que a su vez nos traiga
otra necesidad imperiosa: la de compartirlo.

Darnos vuelta 
libro en mano
invitación en  boca: leemos? 

Nacida en pleno otoño
preciosa biblioteca de la Casa Quispe Quispe
con el corazón en la mano
yo te saludo.

Marinés

Comentarios

  1. ¡Gracias Marinés por compartir el nacimiento de la biblioteca de Belén! ¡Qué alegría! que en medio de este sin tiempo nazca un nuevo espacio de encuentro con los libros en la familia Quispe Quispe.

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