Dos veces junio, de Martín Kohan

Si bien no es de LIJ, en el Laboratorio de Análisis y Producción que hacemos en La nube (la nube virtual, ahora) somos amplios. A Laura Gutman se le ocurrió reseñar esta dura novela de Martín Kohan. Y lo hizo tan bien que los que no la leímos ya queremos hacerlo. Que la disfruten.


Por Laura Gutman*
                                                                            
Si una doble negación resulta al fin una afirmación quedamos entrampados en la fatalidad del lenguaje para servirnos de él. 
La novela Dos veces junio de Martín Kohan se sirve del poder de la negación o rechazo del otro para trazar una pregunta fatal, construida sobre una afirmación monstruosa: ¿A partir de qué edad se puede comenzar a torturar a un niño?
La brutalidad de la frase está rematada por un detalle no menor: en el texto la palabra “comenzar” está escrita con “ese”, resaltando todavía más lo obsceno de la pregunta.
El “error” de ortografía deja al descubierto el “horror” del dispositivo trágico de la crueldad ejercido socialmente desde un discurso hegemónico donde se parte del supuesto de que “se puede” torturar a un niño.  
“Insistiré en que la crueldad siempre implica un dispositivo sociocultural. En esto hay una diferencia sustancial con la agresión, heredad instintiva del hombre. El instinto no es de por sí cruel. Está sujeto a la ley de la sobrevivencia y por eso puede llegar a ser feroz, pero no cruel. El paradigma del dispositivo de la crueldad es la mesa de torturas; pero el accionar cruel no está acotado solamente al ámbito puntual del tormento, sino que debe estar sostenido por círculos concéntricos, logísticos, políticos, desde ya incluyendo a los beneficiarios de las políticas que se pretenden instaurar por el terror.” (Fernando Ulloa en Sociedad y Crueldad).
La novela de Kohan traza una línea de ida y vuelta en la vida del joven protagonista y narrador de la historia, un soldado conscripto que cumple el servicio militar en el ejército en 1978. La línea que comienza una noche de junio durante el partido Argentina-Italia, en el marco del campeonato mundial de fútbol que se juega en el país, y culmina en junio de 1982 en el marco de una reunión familiar en la cual se descubre el destino del niño en cuestión.
Con algunos elementos de la Bildungsroman, o novela de formación y la estructura de la nouvelle, entre la novela corta y el cuento, Dos veces junio sostiene el tono escéptico y obediente del joven que entra al mundo adulto a los tumbos, expulsado definitivamente de la infancia y relegando al espacio de los sueños y pesadillas la única posibilidad de encontrar una respuesta personal a lo vivido. 
Sobre el final la cuestión de la infancia lo interpela desde un territorio del que ha sido expulsado para reconocer una sola asimetría ineludible entre adultos y niños: la que establece el cuidado.
Entonces la pregunta que da comienzo a la trama de la novela admite una sola respuesta: Nunca.
Nunca Más.
En suma, un libro para adultos sobre la tragedia y el dolor de la maquinaria de la crueldad al servicio de la política de la violencia y la apropiación. Pero también una novela sobre la tragedia de la infancia y la juventud marcada por la historia de nuestra sociedad.


*Laura Inés Gutman: Intérprete titiritera y de música popular. Licenciada por la UNA en Artes del Movimiento. Egresada del Teatro Colón en Regiè y de la Escuela de titiriteros del Teatro San Martín. Docente universitaria en la Licenciatura en Musicoterapia UBA. 



Dos veces junio
Martín Kohan
Debolsillo, 2008.



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