La chica invisible
Débora Pert, participante del Laboratorio de Análisis y producción de LIJ desde su inicio, nos acerca esta reseña de Rafaela, novela de Mariana Furiasse que bien puede considerarse un exponente del realismo dentro de nuestra LIJ.
Por Débora Pert*
Rafaela es una novela de Mariana Furiasse, de la colección “El Barco de Vapor”, Editorial SM, dirigida a adolescentes.
La tapa, con una bella ilustración de Pablo Bernasconi, no nos deja indiferentes: un violín puesto en forma vertical con zapatos, como si fuera el cuerpo de una persona. ¿De quién será? ¿Por qué elegir ese instrumento? Y los dos cuerpos estilizados a ambos lados.
A medida que la leemos, descubrimos que Rafaela es muy tímida y callada: debido a su exceso de peso siente que es invisible para los demás.
Tiene una hermana con la que, aunque son muy distintas, se relaciona muy bien; en cambio su mamá solo sabe decirle que tiene que rebajar de peso. De su papá, que las abandonó y ni siquiera la dejan nombrarlo, solo le queda su violín.
Sus compañeros la maltratan por no tener el cuerpo espigado que impone la sociedad. Pero no todo es triste. También tiene un grupo de amigas con quienes comparte lo que le sucede. Y nace el primer amor: se reencuentra con Simón, su amigo del jardín de infantes, que en ese momento había caído hechizado por los sonidos que ella arrancaba del violín. Al principio el reencuentro es conflictivo porque Simón está con otros chicos que se burlan del físico de Rafaela. Pero poco a poco ella lo conquista.
El libro está escrito en forma de diario personal, aunque no indica fechas en el inicio de los capítulos.
Es para leerlo de una “sentada”: atrapante, una vez que uno lo empieza, quiere saber cómo sigue y crea empatía con la protagonista.
Fue ganador del “Premio Barco de Vapor 2002”.
Mariana Furiasse. Ilustraciones de Pablo Bernasconi.
SM, 2002.
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