Presentación de donde baila la tierra, de Stella Calloni
El martes 7 de mayo en la Feria del Libro de Buenos Aires se presentó donde baila la tierra, la antología poética de Stella Calloni. Compartimos esta crónica de la presentación, de María Pía Chiesino.
Por María Pía Chiesino
El martes 7 de mayo, en la Sala Rodolfo Walsh de la Feria del Libro de Buenos Aires, me invitaron a participar de la presentación de donde baila la tierra, la antología poética de Stella Calloni publicada por Ediciones Continente. Participaron de la mesa Ana María Ramb, Nora Lafón, Mariana Baranchuk y por supuesto, la autora.
Calloni es periodista y escritora. Ganó, entre otros, el Premio Latinoamericano de Periodismo José Martí en 1986, el Premio Rubén Darío en 2008, y el Premio Rodolfo Walsh en 2012. Fue corresponsal de guerra en América Central y se especializó en política internacional. Su libro Operación Cóndor, expone una investigación de las más profundas sobre el plan de inteligencia coordinado por las dictaduras de Argentina, Paraguay, Chile, Uruguay, Brasil y Bolivia para la implementación del terrorismo de estado y las políticas represivas de la década del setenta.
Stella Calloni nació en Entre Ríos, y en la presentación destacó que ese hecho y haber vivido en la selva misionera siendo muy chica (su madre trabajaba allí como maestra rural), marcaron su poesía de manera tajante, distanciándola de lo urbano. Comentó además, que en Paraná, en la casa de la tía con la que fue a vivir para continuar sus estudios, había una biblioteca enorme en la que pasaba días leyendo. Y aseguró que su experiencia inicial de escritura fue con la poesía.
Lo particular de la presentación fue que, a pesar de su enorme trayectoria y del reconocimiento que tiene como periodista internacional, que hablaran mujeres tan cercanas afectivamente a la autora, no la despegó de lo político (es imposible), pero ayudó a que el evento remitiera a un ámbito íntimo y personal. Habló de la relación entre el amor y la lucha, de sus hijas, de sus viajes, del placer de pasar una receta, o de compartir una cena con gente querida, del arte y del erotismo, como aspectos de la su vida, inescindibles de su voz poética.
A pesar de que estaban presentes muchas personalidades destacadas del ámbito social y cultural, entre ellos, los embajadores de Cuba y de Nicaragua, el encuentro se pareció más a una lectura junto al fuego que a una presentación formal.
Compartimos dos de los poemas de donde baila la tierra.
El entierro
Hemos caminado llenos de tarde
al oeste del río,
vimos
caer
el niño hacia la tierra,
entre cascotes y silencios
y palomas monteras,
le envolvimos el corazón
con sus trapitos
y se perdió temblando
en las raíces.
Por los ojos del padre
vagaban oscuras mariposas
y con el hacha ardiendo
se fue a matar quebrachos
por el monte.
Amarillo intenso
A Vincent Van Gogh
Se mecen los girasoles
bajo el viento del sur
y esas praderas
rememoran tus ojos
y vagamos
por espejos ardientes,
sobre los tejados púrpuras
de los hospicios,
tocando aquellos sueños,
delirios y nostalgias
que temblaban en vos.
Pequeño vendedor de soles
¿andarás aun buscando
mieles entre los trigales,
girando como los derviches,
todo vos amarillo,
sembrándonos la luz
deshabitando para siempre
la nuestra soledad?
Ediciones Continente, 2019.
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